Marta Ortega y Carlos Torretta ya son marido y mujer, y lo han celebrado por todo lo alto. ¿Quieres conocer los detalles que aún no sabías? ¡Este es tu post!
Este pasado viernes se celebró la boda que todos estábamos esperando, la boda del año. Sí, hablamos de la boda de Marta Ortega y Carlos Torretta. La casa familiar de la Dársena fue el escenario elegido por la pareja para celebrar la ceremonia civil donde se darían el “Sí, quiero”.
Pero, ¿qué es lo que aún no sabemos de la boda de Marta Ortega y Carlos Torretta?
Lo que no sabemos de la boda de Marta Ortega y Carlos Torretta
- Los cuatro looks nupciales de la novia
Dos días ha durado la celebración del enlace de Marta Ortega y Carlos Torretta, un enlace que ha hecho eco en todas las partes del mundo y que ha reunido a unas 400 personas en A Coruña. En estos dos días, la heredera del reino de Inditex ha lucido cuatro looks nupciales. Todos los diseños firmados por Pierpaolo Piccioli, de la Maison Valentino.
El look protagonista fue este: el de novia.
Un vestido de dos piezas casi blanco, con un ligero tono rosa. “A través de este diseño he querido transmitir un imaginario con un inusual sentido de romanticismo, lleno de ligereza, frescura e intención para ilustrar su fuerte personalidad”, explicaba el diseñador Pierpaolo Piccioli en un comunicado oficial.
Para el cóctel que se ofreció tras el enlace en el Club Náutico de A Coruña, Marta Ortega se fue al lado opuesto y del blanco, pasó al elegante negro. Optó por un vestido negro con blusa de transparencias y una chaqueta estilo blazer. Un total-black que nos encantó.
Otro de los vestidos que nos dejó boquiabiertos fue el que lució el segundo día de su fiesta en el Centro Hípico de Casas Novas. Un vestido largo y cubierto de lentejuelas y laterales en satén. Aquí podemos verla en una foto que compartió Eugenia Silvia (una de las invitadas) con Jon Kortajarena.
Pero ahí no queda la cosa porque para el baile final Marta se volvió a cambiar de vestido para lucir un voluminoso vestido de salón en color rosa. Un look que puso el broche de oro final.
Aún no sabemos cuál nos gusta más.
- Los invitados más vips
Un total de 400 invitados pudieron disfrutar del enlace entre Marta Ortega y Carlos Torretta: Jon Kortajarena, Eugenia Silva, Amaia Salamanca, Sofía Sánchez de Betak, Rafael Medina o Alonso Aznar, estuvieron en la velada más top del año. El rey de Inditex, Amancio Ortega quiso dar una sorpresa a su hija y a los invitados, por lo que todos pudieron disfrutar de música en directo. Y no de una banda cualquiera.
Contaron con grandes tallas internacionales como Norah Jones, Jamie Callum, Mark Ronso (amigo de Marta Ortega) y el mismísimo Chris Martin, cantante de Coldplay.
Solo una familia como la de Amancio Ortega puede permitirse este lujazo.
- El banquete
El encargado de organizar toda la cena fue Albert Adriá, del restaurante elBarri y hermano de Ferran Adriá. Un menú compuesto por crema de parmesano con trufa negra, mini shitakes en escabeche oriental, tomates con gelatina de su consomé, guisantes y manitas de cerdo a la menta y coliflor con caviar. Sin duda, tuvo que estar exquisito.
- La tarta
El momento tarta siempre es uno de los más esperados en un enlace, y no solo por lo rica que puede estar sino por la forma de esta, el tamaño, su decoración… Esta vez la pareja también quiso sorprender a todos los asistentes y no escogieron una tarta de varios pisos para hacerlo.
¿Habéis visto alguna vez una tarta más grande que esta? 400 comensales y una sola tarta, obra de Cédric Grolet.
- Peluqueros y maquilladores para los invitados
Tanto el viernes en el Club Náutico, como el sábado en la hípica, la familia Ortega dispuso de peluqueros y maquilladores para retocar a sus invitados. Por ejemplo, el Hotel Finisterre se cerró al público y tuvo que habilitar su salón de bodas en un salón de belleza improvisado.
- La llegada de los invitados
La cena de gala y los invitados fueron muy difíciles de captar ya que llegaron a Casas Novas, una enorme finca de 71.000 metros cuadrados, en coches con chófer dispuestos por los novios. Este lugar, Casas Novas, lo construyó Amancio Ortega en Larín (Arteixo) a unos 20 km de su casa. Un lugar que, en 2000, fue testigo del concurso de saltos internacional que tiene la máxima puntuación de la Federación Hípica Internacional.
Seguro que sobró sitio para más invitados.
Una boda de alfombra roja, marcada por sorpresas y buena música, que será difícil de olvidar. ¡Feliz vida, novios!
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