¿Estás dejando de fumar y tienes boda a la vista? Todas sabemos que las bodas son un gran reto para las personas en tu misma situación, Por eso hoy, con motivo del Día Mundial Sin Tabaco, hemos recopilado una serie de consejos que te ayudarán a evitar fumar en una boda.
Las bodas son el caldo de cultivo perfecto para los fumadores sociales, esas personas que solo fuman en compañía de otras personas y en ocasiones especiales, relacionadas con ambientes festivos. Por eso, el número de fumadores parece multiplicarse en este tipo de celebraciones.
Si a eso le añades que fumar un cigarro puede ser la excusa perfecta para suavizar la presión social de encontrarte con personas que hace mucho que no ves, o para iniciar una conversación, el peligro aumenta. Muchos exfumadores recaen en el tabaquismo en este tipo de situaciones. Estos consejos te ayudarán a evitar fumar en una boda.
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6 consejos para evitar fumar en una boda
1. Evita los grupos de fumadores
Los fumadores suelen reunirse a la entrada del recinto destinado a la ceremonia o al banquete, y muchos de ellos evitan entrar al interior o retrasan la entrada para quedarse en la calle fumando un cigarro. Presenciar la ceremonia y entrar directamente al salón destinado al cóctel o al banquete te evitarán el mal trago de ver fumar a los demás.
Si el cóctel o el banquete son al aire libre, trata de evitar los grupos de fumadores. Es una buena oportunidad para conocer gente nueva.
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2. Controla la ansiedad de fumar
Ya sabes que la ansiedad dura apenas unos segundos, esos en los que tienes que decidir si enciendes o no el cigarro, y que puede repetirse varias veces al día. Acude a la boda con las herramientas necesarias para tomar la decisión correcta cuando suceda. Nuestra recomendación es que acudas a un profesional sanitario experto en tabaquismo antes de la boda que te dé unas pautas adecuadas.
3. Recurre a tu entorno
Si tu pareja, familia y amigos están al corriente de tu deseo de dejar de fumar, te ayudarán a evitar situaciones comprometidas. Busca cosas que hacer cuando aparezcan las ganas de fumar. Sabes que durarán poco, así que puedes aprovecharlas para ir a saludar a alguien que no esté fumando, para felicitar a los novios…
4. Acude a tus alternativas habituales
Si hay algún truco al que acudes en tu vida diaria cada vez que aparece la ansiedad, no te olvides de llevarlo contigo. Es la única manera de evitar fumar en una boda. Por ejemplo, si sueles sustituir el gesto de tener un cigarrillo en la mano por un boli, una rama de canela o cualquier otra cosa que te reconforte, llévalo contigo. Si comer un caramelo o masticar un chicle te sirven como recurso, no te olvides de meterlos en el bolso. Así podrás acudir a tu kit de ayuda cuando sea necesario.
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5. Piensa en los niños de la boda
Fumar cerca de ellos es malo para su salud y, además, puede ayudarles a normalizar el hábito, lo que a la larga puede llevarles a convertirse de fumadores pasivos en fumadores ocasionales o habituales. Si no quieres hacerles daño ni físicamente ni con tu ejemplo, ya tienes una razón de fuerza más para evitar fumar.
6. Si no vas sin pareja, aprovecha la boda para conocer gente
El tabaco provoca mal aliento, impregna la ropa y el pelo con su olor, empeora el aspecto de la piel, de las uñas y los dientes… Y, si quieres aprovechar la boda para conocer a alguien, por eso de que de una boda sale otra, lo mejor es que vayas preparada para dar la mejor impresión. Acércate a la gente que no fume, nunca se sabe lo que puede pasar.
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