Por muy bonita que sea la ceremonia y muy bien que hayáis organizado vuestro enlace, no habrá peor recuerdo para vuestros invitados que comer mal. Por eso, ofrecer el mejor menú dería ser una de tus prioridades principales. Te ayudamos a conseguirlo.
Ofrecer el mejor menú posible el día de su boda se encuentra entre las prioridades de casi todas las parejas. Y así debe ser, porque es el aspecto más valorado por los invitados. Probar la comida por adelantado y contar con una empresa flexible, capaz de adaptarse a vuestros gustos y necesidades, son dos factores claves a la hora de decidir el mejor servicio de catering, pero hay muchos otros.
La mayoría de las fincas y espacios de celebración de bodas suelen tener cocina propia o trabajan con un catering en exclusiva. También hay casos en los que te permiten elegir entre tres o cuatro empresas de catering, pero son los menos. Si queréis que se encargue un catering en particular del banquete de vuestra boda, lo mejor es que la organicéis en un espacio privado, como una casa familiar, por ejemplo.
Foto: Instantánea & Tomaprimera. Mirador del Golf, palacio de Negralejo.
Consejos para ofrecer el mejor menú el día B
1. Buscad información y referencias
A través del boca a boca, por internet… Hoy abunda la información de cualquier servicio que se quiera contratar. Por eso, para ofrecer el mejor menú, lo mejor es contar con las opiniones de diferentes parejas que hayan probado los servicios de diferentes empresas de catering para organizar su banquete de bodas.
Siempre que tengáis la posibilidad de elegir el catering, es importante empezar la búsqueda en función del tipo de comida que queráis ofrecer. Lo ideal es dar con un catering especializado en ello.
2. Consultad los servicios ofrecidos
Una empresa de catering no se limitará a preparar la comida. Además, deberá de encargarse de servirla y os deberá informar sobre otros servicios, como la repostería, la barra libre o la decoración. Si queréis incorporar barras de comida, corners gourmet o espectáculos de show-cooking a vuestro banquete, también deberían encargarse de ellos. No dudéis en consultarles todas vuestras dudas.
Foto: Mónico Catering
3. Tened claro el presupuesto
E informad de él con honestidad a la empresa de catering. Elegid la empresa que mejor se adapte a él, teniendo en cuenta vuestras preferencias personales. Para que no haya sorpresas, pedid que os detallen el valor de cada cosa, con impuestos incluidos. Si hay pluses especiales por desplazamientos o por el motivo que sea, pedid que los especifiquen con antelación.
4. Informad del número de invitados
Es importante que comuniquéis a la empresa de catering el número exacto de personas que os van a acompañar el día de la boda. Así podrán prever las necesidades particulares de la celebración y podrán preparar de la mejor manera posible los platos acordados.
5. Probad antes de contratar
Es fundamental que probéis la comida antes de cerrar su contratación. Por ejemplo, podéis organizar una cena romántica, o pedir una degustación inicial tras pedir el presupuesto, quedando pendientes de analizarlo. Eso os permitirá haceros una idea de la calidad de los productos con los que trabajan y de la presentación de los platos.
Una vez que hayáis pagado la señal, quedaréis atados a sus menús cerrados. No obstante, convendría que pudieseis hacer una segunda degustación una vez señalizado el banquete y reservada la fecha. Esta degustación suele estar incluida en el precio final y admitir hasta seis personas, lo que os permitirá acudir con vuestros padres o familiares más cercanos.
6. Fundamental, la calidad de los productos
La calidad de los productos debe ser la prioridad del catering elegido. Para poder ofrecer el mejor menú, deben utilizar preferiblemente productos frescos de temporada y cocinar los platos principales, como los pescados y las carnes, en el momento. La creatividad y la originalidad en la presentación de los platos y el cuidado en la puesta en escena, también son elementos que debes valorar.
Foto: Instantánea & Tomaprimera. Mirador del Golf, palacio de Negralejo.
7. La cocina, mejor in situ
Es fundamental que el catering que elijas cocine en la propia finca. Que no lleve la comida precocinada y la caliente en el lugar de celebración del evento. Si es una empresa ajena a la finca, debería conocer el espacio de antemano. Lo ideal sería que hubiese trabajado allí con antelación. Así llegarán sabiendo dónde están las cocinas, si las hay, y dónde instalar el material.
Si en la finca no hay cocina o la cocina no es la ideal para cubrir el evento, asegúrate de que el catering cuente con medios suficientes, como contar con un camión-cocina que pueda llevar, o la posibilidad de montar una carpa para cocinar y servir adecuadamente el banquete.
8. Obligatorio, flexibilidad
El catering elegido debe ser capaz de adaptarse al máximo a vuestros deseos, personalizando todo lo posible sus menús. También tiene que poder adaptarse a las necesidades especiales de vuestros invitados: personas con diferentes intolerancias o alergias alimentarias, celiacos, ancianos, niños…
Respecto a los elementos decorativos, es un valor añadido contar con un catering que tenga una oferta variada de vajillas, cuberterías, cristalerías, mantelerías, sillas, etc., para adaptarlos al estilo de vuestra boda. Si lo que os ofrecen no os encaja, pero siguen pesando la calidad y el saber hacer de su cocina, siempre podéis alquilar estos elementos.
Foto: barra de ibéricos en La Quinta del Jarama
9. El equipo, que sea eficaz
El equipo debe ser capaz de trabajar con rapidez y eficacia, no solo a la hora de preparar los platos, también a la de servirlos.
10. Camareros suficientes
Debe haber al menos un camarero por cada diez invitados. Un buen servicio es fundamental y debe ir de la mano de una buena comida. Si la relación de camareros es inferior a 1 por cada 10 invitados, el servicio pierde calidad.
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