¿Seis meses, seis años? ¿Te mueres de ganas por lucir un anillo de compromiso y no sabes cuánto tiempo debéis esperar para prometeros? Hablar de tiempos, en temas del corazón, es altamente arriesgado. En LucíaSeCasa preferimos hablar de señales que os indiquen que estáis preparados (o aún no) para dar el gran paso.
¿No tienes claro cuánto tiempo debéis esperar para prometeros? Cada relación es diferente y no hay una regla de oro que indique el tiempo que una pareja debe salir antes de encaminarse hacia el matrimonio. Además, lo que puede ser determinante para unos, puede no tener el menor significado para otros. Sin embargo, hay algunas pistas importantes que indican cuándo una pareja está lista para dar el salto a la vida matrimonial, y cuándo conviene esperar.
Debéis esperar para prometeros si…
– No os conocéis suficiente
Durante las fases iniciales del amor, la pareja se encuentra cegada por la pasión y el amor romántico, y no es capaz de ver cómo es realmente la otra persona. Para dar el salto al matrimonio, es importante conocerse en profundidad y haber pasado juntos algunos altibajos de la vida. Y el tiempo es fundamental para llegar a esto. La fase de enamoramiento no suele superar los tres o seis meses en la mayoría de las parejas, pero es importante dejarla atrás para comprender que la otra persona no es tan perfecta como te habías imaginado.
Solo si eres capaz de ver a tu pareja como es realmente, con sus virtudes y defectos, y aun así quieres seguir a su lado, estarás tomando una decisión sólida y segura.
– Los principios básicos no están aún en su sitio
Hay una serie de principios que son vitales para la salud de una relación y que deben darse antes del compromiso. Son los siguientes: confianza, honestidad, capacidad de perdonar, compasión, flexibilidad, pasión y amor. Si uno o más de uno de estos principios es débil en la relación, ésta queda expuesta a la ruptura y es mejor esperar para prometeros. Una vez que se afiancen, podréis dar el paso definitivo.
– Esperas que tu pareja cambie
Si el cambio que estás esperando es algo intranscendente, como la frecuencia semanal con la que tu pareja saca la basura a la calle, probablemente puedas vivir con ello. Pero si lo que te gustaría ver es un cambio más serio, probablemente no se trate de la persona más adecuada para ti. Él no tiene que ser perfecto, pero si no estás dispuesta a aceptarle con todas sus imperfecciones, entonces deberías buscar a otra persona. La probabilidad de llegar a cambiarle no es muy elevada.
– No sois capaces de negociar límites
Ser capaces de negociar límites es fundamental para una pareja que ha decidido compartir su vida. Esta negociación puede tener que ver con aspectos cotidianos, como la frecuencia con la que se sale sin la pareja o el tiempo que se pasa con los amigos o con la familia de cada uno. A medida que las parejas evolucionan, puede ser necesario negociar nuevos límites o renegociar los antiguos. Cuando los dos miembros de la pareja son capaces de escucharse y de hacer concesiones, la pareja tiene más posibilidades de perdurar.
– No tenéis clara vuestra compatibilidad sexual
Es fundamental que cada miembro de la pareja tenga claros los gustos del otro cuando se trata de lo que sucede entre las sábanas. Solo así disfrutaréis de una vida sexual feliz juntos, ingrediente clave para una relación duradera. El sexo no lo es todo, pero cuando la pareja no es capaz de satisfacer las necesidades del otro, puede ser determinante para acabar con la relación. Es fundamental hablar de estos temas a tiempo, para conocer la compatibilidad sexual real a largo plazo de la pareja.
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