Están siempre muy unidos y dispuestos a ayudarse. Cuando llega el momento de celebrar una boda, los gitanos viven una de las máximas expresiones de la fiesta para ellos.
¿Sabías que la última moda de una boda gitana es grabar un videoclip?.
Hoy vengo a hablarte de las bodas gitanas. Quédate, te encantará conocer sus tradiciones tan hermosas.
Las bodas gitanas, tradición en estado puro
Los gitanos son personas con unas tradiciones muy arraigadas; personalmente, es algo que me gusta mucho.
Es muy bonito ser fiel a una tradición. En una sociedad donde tenemos más que asumida la posibilidad de vivir en pareja sin estar casados, los gitanos aún conservan la tradición de unirse en matrimonio antes de mantener ninguna relación sexual.
Algo de lo que presumen con mucho orgullo, es la honra. El hecho de que una chica se case con su primer novio y, además, lo haga virgen, es lo más grande para cualquier familia gitana; tanto la de la novia como la del novio.
Son muy pocas las gitanas que no llegan vírgenes al matrimonio. Si eso sucede, la tradición les prohíbe casarse; pero si hay algún hombre gitano soltero que acepta juntarse con ella, lo aceptan.
Me parece realmente bonito el hecho de que las mujeres gitanas guardan su pureza hasta el momento de casarse, para su marido. Y lo hacen desde niñas.
El pedimiento gitano
Cuando una pareja de jóvenes se conoce y se gusta, normalmente comienzan a hablar, a conocerse. Llega un momento en que el chico le pide a la chica si quiere salir con ella, ¿cuánto tiempo hace que no escuchas algo así?. Si la chica acepta, es cuando organizan el pedimiento gitano.
La pareja anuncia a sus respectivos padres que se quieren. Pasados unos días, y tras haber comunicado a toda la comunidad la celebración, organizan la fiesta del pedimento gitano.
El día elegido, la novia va a la peluquería para peinarse y maquillarse. Se pone toda guapetona y regresa a casa para ayudar a su madre con los preparativos de la fiesta que, normalmente, se celebra al caer la tarde.
Una vez que llega el momento de prepararse, la futura novia elige ropa muy llamativa; con colores intensos y telas brillantes, además de adornos llenos de perlas y vivos colores.
Por su parte, el novio ayuda a su padre a preparar el lugar de la celebración (colocar mesas, sillas y la carpa, si es necesario). Igual que su futura prometida, se arregla con un traje que, normalmente, acompaña los colores del vestido de ella.
Llega el momento en que la familia del novio se dirige a la casa de la familia de la novia. Allí todos esperarán a los gitanos mayores para hablar.
Una vez que están los mayores, o chaches, presentes comienza la celebración del compromiso. Se dirigen a los dos jóvenes novios de esta manera:
– “Rosa hermosa, ¿quieres al clavel?”
– “Clavel, ¿y tú a la rosa?”
Si la pareja contesta afirmativamente, la respuesta tiene que ser muy contundente por respeto a las personas mayores que tienen enfrente.
Comienza, entonces, una gran fiesta de celebración donde las dos familias festejan el recién estrenado compromiso. A partir de ahora empezarán a preparar la futura boda de los novios.
La boda gitana
Si hay algo que caracteriza a cualquier boda gitana, es la ilusión con la que todos los asistentes preparan el gran día. Como te decía al comienzo de este artículo, la celebración de una boda es la máxima expresión de una fiesta para los gitanos.
Cuidan con mucho mimo cada detalle de la boda; y es que, los novios se casan para toda la vida.
Una boda gitana se divide en tres partes, muy importantes para ellos.
El casamiento
El día de la boda está lleno de tradiciones. En primer lugar, los familiares de ambos cónyuges les ayudan a vestirse en la casa de cada uno. Allí aprovechan para hacerse un reportaje fotográfico; no sólo están poniéndose guapos. También aprovechan para cantar y bailar como sólo saben hacer los gitanos.
Las novias gitanas son muy presumidas. Ellas mismas dicen que prefieren ir incómodas, pero sentirse muy guapas y especiales. Para el momento del casamiento suelen elegir un vestido blanco, símbolo de pureza. No escatiman en adornos y pomposidad. Sus vestidos de novias suelen ser espectaculares.
Aunque lo más importante para una novia gitana es la corona que llevará en la cabeza. Ellas sólo se casan una vez en la vida, y el día de su boda lo celebran por todo lo alto.
La ceremonia religiosa siempre se celebra por la tarde, hacia última hora. Suelen casarse por la iglesia evangélica, pero hay también muchos gitanos católicos. Así que, es probable que alguna vez veas una boda gitana en un templo católico.
En estas bodas no hay padrinos, como estamos acostumbrados a ver. Son los padres, el padre de la novia y el padre del novio, quienes los entregan al pastor para que oficie la ceremonia del casamiento.
El Yeli
En el momento del banquete es cuando empieza realmente la propia boda gitana con sus mejores tradiciones. Es costumbre que los hombres de la boda cojan a la novia en brazos y vayan pasando por las mesas de los invitados.
Éstos depositan dinero para los novios; detrás de esta comitiva van las mujeres de la boda regalando claveles a quienes han dado dinero.
Y, ahora sí, llega el momento del Yeli. Es cuando las mujeres se juntan para hacer la prueba del pañuelo a la novia.
Es una tradición muy respetada por los gitanos; como te he dicho antes, la virginidad de la novia es todo un orgullo para las dos familias. Por eso, esta parte de la boda gitana es tan importante para todos ellos.
La prueba del pañuelo la hace una mujer mayor, la ajuntaora. Antes de comenzar este ritual, la novia se cambia de vestido. Tradicionalmente, utilizaba un camisón blanco; ya sabes que el blanco es el color de la pureza. Sin embargo, ahora muchas novias gitanas apuesta por un vestido para este evento.
Se celebra a puerta cerrada, en una habitación próxima a donde están todos los invitados de la boda. Disponen una camilla o una mesa en el centro de la habitación, y ponen sobre ella pétalos de rosa y claveles.
Llega el momento del ritual. La ajuntaora introduce un pañuelo en la vagina de la novia y éste debe salir ligeramente manchado, pero no de sangre. Es por la rotura del himen.
Otro elemento fundamental, y muy sentimental, en una boda gitana, es el pañuelo. De hecho, las mujeres lo conservan durante toda su vida. Lo llaman el pañuelo de las tres rosas porque la ajuntaora lo introduce formando tres pliegues.
Una vez finalizada esta parte de la boda gitana, las mujeres mayores muestran a todos el pañuelo y es cuando cogen a los novios entre todos.
Los hombres se “parten la camisa” en señal de alegría por la noticia. Y todo el mundo celebra el gran momento tirando peladillas (son almendras cubiertas de una capa lisa de azúcar) a los novios, y cantando y bailando.
La fiesta
Es la última etapa de la boda gitana. Aquí ya comienzan a celebrar la feliz unión que acaban de confirmar. Para esta ocasión, la novia elige otro vestido, ya mucho más especial. Suelen vestirse con mucha pedrería, muchos brillos y parecen verdaderas diosas.
La fiesta puede llegar a durar hasta tres días. Los gitanos con gente con mucho arte y llevan la música y las celebraciones dentro de su cuerpo.
Si alguna vez te invitan a una boda gitana, no dudes en asistir porque es muy grande lo que ellos sienten, y así lo manifiestan.
Por último os dejamos con este vídeo de más de una hora para que puedas descubrir como es una boda gitana en su interior, como se vive y como son sus costumbres dentro de estos días de celebración tan importantes.
¿Ya has asistido a alguna?, ¿eres gitana y te casaste con una boda llena de duende? Cuéntanos.
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