Tu álbum de boda será un recuerdo maravilloso que te acompañará siempre, y que no debes descuidar lo más mínimo. Ni a la hora de seleccionar al fotógrafo, que es clave, ni a la de elegir las instantáneas de tu gran día que deberán estar incluidas. Estas 12 no pueden faltar.
Elegir un buen fotógrafo para tu boda no es un asunto banal. No vale cualquiera. Es muy importante que sea un gran profesional, capaz de captar momentos únicos, especiales, y de reflejarlos con belleza. Tiene que ser capaz de estar en el instante y en el lugar precisos, y eso solo se logra con experiencia y buen gusto.
Para acertar, es fundamental entrevistarte en persona con varios fotógrafos y revisar su trabajo para comprobar que su estilo se adapta al tuyo y a lo que deseas para tu boda. En V Wedding Gallery podrás encontrar a cuatro fotógrafos extremeños que están arrasando en el mundo de las bodas. Desde allí podréis hacer un repaso de su excepcional trabajo con material digital y álbumes físicos y digitales que te dejarán sin palabras. Suyas son las fotos que acompañan este artículo. ¡A disfrutar!
12 momentos que deberán quedar inmortalizados (sí o sí) en tu álbum de boda
1. Los preparativos de la novia
Fundamental. Es uno de los momentos más emocionantes e intensos de la boda y no puede faltar bajo ningún concepto. La emoción inmensa de la novia, rodeada de sus seres más queridos durante sus últimas horas de soltería mientras se viste, tiene que captarse con sensibilidad y buen gusto.
2. Los preparativos del novio
Fundamental: asegúrate de que el equipo fotográfico elegido se comprometa a cubrir tanto a la novia como al novio antes de la boda. Él también es importante y estos momentos previos junto a sus seres queridos deben aparecer en el álbum de boda.
3. La entrada de la novia a la ceremonia
La mayoría de las parejas comparten este momento como uno de los más emotivos de su gran día. La llegada de ella, el camino hacia la mesa de ceremonias, el encuentro con el novio… Tienen que estar sí o sí en tu álbum de boda.
4. La cara del novio
La emoción, esa maravillosa emoción (contenida o no) reflejada en el rostro del novio al encontrarse con la mujer de su vida momentos antes de darse el “sí, quiero”, el brillo de sus ojos… La caricia de ella, que se supone el sexo débil, ayudándole a retener las lágrimas a punto de desbordarse. Son instantes mágicos difíciles de captar, porque a veces duran apenas un segundo, pero que no pueden faltar.
5. La salida de los recién casados
Frente a la emoción previa, la alegría desbordante de saberse marido y mujer y de reencontrarse con sus seres queridos para compartirlo con ellos. Importantísimo que queden inmortalizados esos rostros, reflejo de una felicidad inmensa.
6. Una foto familiar
Los abuelos, qué bonitos, qué grandes son los abuelos. Qué suerte tienen aquéllas parejas que pueden disfrutar de su presencia el día de su boda. Si es tu caso, no dejes de hacerte fotos tan maravillosas como esta a su lado. Las conservarás como un tesoro el resto de tu vida.
7. Las amigas de la novia
Compañeras eternas, sacos de lágrimas, testigos de excepción de una relación que llega a su máximo apogeo. Ellas, que te han acompañado siempre, no pueden faltar en tu álbum de boda. Guapas, alegres, divertidas. Tan especiales para ti.
8. La llegada de los novios al banquete
Todo está organizado para recibir a los recién casados. La decoración más cuidada, los invitados en sus mejores galas, listos, ahora sí, para dar comienzo a la fiesta. Y la pareja rebosante de felicidad. Una foto (o las que hagan falta) de su llegada al lugar de la celebración no puede faltar.
9. La entrega del ramo
¿Quién será la elegida? ¿La hermana de la novia? ¿Su cuñada? ¿Su mejor amiga? Es un momento especial de la fiesta y el fotógrafo debe estar ojo avizor para captarlo. La sorpresa, la emoción, la alegría… tienen que reflejarse en la instantánea.
10. El primer baile como marido y mujer
El primer baile de los novios da comienzo a la fiesta, y suele ser muy emocionante. Una melodía bien elegida, con sentido para los dos participantes, besos, abrazos, miradas de adoración… y la cámara del fotógrafo alerta para captarlo.
11. Una foto de la fiesta
Diversión a tope después de los nervios y de la tensión, del agobio de los preparativos, con la tranquilidad de saber que todo ha salido bien. El fotógrafo de tu boda deberá quedarse hasta el final para captar los momentos de desmelene y de diversión máxima.
12. Una foto de la post boda
La post boda: una práctica muy recomendable. Volverte a poner el vestido completamente relajada para dar lo mejor de ti misma y de tu pareja días después de la boda, incluso en el destino elegido para vuestra luna de miel. Os recomendamos hacerla 100%.
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