El seating plan se ha convertido en uno de los rincones protagonistas de cualquier boda. Si además se crea con fotos de los propios invitados, el resultado es aún más especial
Para quien aún no lo sepa, el seating plan es el lugar donde se indica a los invitados en qué mesa se sentarán durante el banquete. Es una guía visual que facilita la organización del evento, pero también una oportunidad de reflejar el estilo y la personalidad de los novios. Con el tiempo, este elemento ha dejado de ser un simple cartel con nombres para transformarse en una auténtica pieza decorativa. Desde estructuras florales a marcos antiguos hasta paneles de madera decorados con bonitas telas o estructuras minimalistas. Cada pareja busca hacer de su seating plan un rincón que sorprenda y emocione.
Y es que, más allá de su función práctica, este espacio puede decir mucho de la celebración. Por eso, las ideas más originales, y sobre todo las más auténticas y personales, son las que triunfan. Una de nuestras favoritas en los últimos años es el seating plan con fotos instantáneas, que combina utilidad y sentimiento en una sola propuesta. Sí, en lugar de poner lo nombres, los invitados pueden buscar su foto para saber cuál es su asiento correspondiente.
Imagina una estructura decorada con flores o luces, de las que cuelgan pequeñas fotografías de los invitados sujetas con pinzas de madera. En cada imagen, su nombre y el número de mesa. Así, cada persona encuentra su sitio y, además, se pueden llevar un recuerdo físico del día.
Este tipo de seating plan tiene un encanto especial porque genera emoción y cercanía. Cuando los invitados vean su propia foto les provocará una sonrisa inmediata y hará que se sientan realmente parte de la celebración.
Sin duda, este seating con fotos se ha convertido en una de las ideas más queridas por las parejas e invitados. Eso sí, requiere algo fundamental: fotos de todos los asistentes… y un poquito de paciencia para organizarlas.
¿Cómo hacer un seating plan con fotos?
Si ya tienes en mente esta idea, el primer paso es recopilar las fotografías de todos los invitados. Puedes elegir entre dos estilos: fotos de los invitados solos, tipo retrato, para que se reconozcan fácilmente o fotos conjuntas, donde los novios salen con los invitados.
Si optas por fotos individuales, puedes pedírselas directamente o cogerlas de las redes sociales (damos por hecho que, siendo amigos y seres queridos, no se molestarán). También puedes aprovechar alguna reunión previa o encuentro familiar para hacer fotos nuevas, asegurando que todas tengan una estética similar.
Después, imprime las imágenes en formato polaroid o instantáneo para darles ese toque nostálgico tan de moda. Añade debajo el nombre del invitado y el número de mesa. Si te aparece, además, puedes decorarlas con una pequeña etiqueta personalizada o un fondo de color que encaje con la temática de tu boda.
En cuanto a la estructura, las posibilidades son infinitas.
– Paneles de madera o biombos decorativos con cuerdas y pinzas.
– Marcos antiguos con fotos en blanco y negro o un fondo espejo para darle un toque vintage.
– Estructura metálica decorada con lazos y guirnaldas de flores, para un estilo romántico.
Lo importante es mantener la coherencia con el resto de la decoración y que el resultado transmita vuestra esencia como pareja.
Cuando los invitados llegue al banquete y busquen su sitio, se sorprenderán al verse en el seating plan. Muchos se quedarán un rato observando las fotos de los demás, recordando momentos o sacando fotos del rincón para compartir vuestra originalidad. Es un detalle sencillo, pero con una carga emocional enorme. Si buscas más ideas para hacer de tu seating plan el rincón más especial, aquí os dejamos más ideas que os encantarán.
from Lucia Se Casa https://ift.tt/Q4PYdR7
Fuente Lucia Se Casa https://ift.tt/Q4PYdR7
No hay comentarios:
Publicar un comentario