Hay ciertos elementos que no debes pasar por alto cuando organices tu viaje de luna de miel. Toma nota de los más importantes.
Flores, trajes y mucha ilusión. Sin duda, estamos hablando de uno de los días más mágicos: una boda. Cuando se organiza un día así de especial, debemos tener una serie de aspectos en cuenta. Si bien el banquete, la ceremonia y las flores son esenciales, también hay otros elementos a los que debemos prestar atención y planificar.
A día de hoy, los viajes de boda han cambiado mucho. Tras meses de nervios y emociones a flor de piel, el viaje de luna de miel es la ocasión perfecta para relajarse y disfrutar de esta nueva etapa.
Actualmente, la gente hace viajes transoceánicos, escogiendo destinos cada vez más exóticos y para que la experiencia sea lo más cómoda y tranquila posible, lo mejor es optar por un seguro de viaje internacional que cubra diferentes garantías. Presta atención a otros aspectos igual de importantes de la luna de miel para pasarlo de maravilla y disfrutar al máximo.
En la maleta no debe faltar ropa para cenas románticas y ropa interior chic
Organizar una boda es emocionante y estresante a la vez. Son muchos aspectos los que debemos cuidar y todos son importantes. Entre ellos, encontramos la luna de miel, que sin duda será uno de los eventos más recordados.
Una vez tenemos claro que queremos irnos de luna de miel, debemos acotar las fechas. Si buscamos ahorrar dinero, nada mejor que planificar días más flexibles que sean de temporada baja para que nos salga más barato. Asimismo, reservaremos directamente el viaje con el hotel para aprovecharnos de posibles promociones. Por otro lado, si indicamos que es un viaje de luna de miel, es muy probable que cuando lleguemos tengamos en la cama un obsequio en forma de chocolate o champagne.
Por otra parte, tenemos que tratar de no aspirar a las bodas que vemos en redes sociales. El boom de las influencers por casarse, creando eventos extraordinarios y viajes de ensueño, provoca que las demás personas comparen ese tipo de experiencias con las suyas. Lo mejor es escoger algunos elementos decorativos o destinos que nos hayan gustado, pero siguiendo con el estilo y la idea inicial nuestra. Esto va muy unido al presupuesto, ya que es crucial que se establezca con la pareja un presupuesto para realizar el viaje. Evidentemente, los todo incluido son más económicos y siempre podemos destinar parte del presupuesto obtenido en la lista de bodas al viaje.
Un aspecto que hay que tener en cuenta es el seguro de viaje, dependiendo del lugar al que nos desplazamos. Analizaremos las coberturas, incluyendo asistencia jurídica y sanitaria. Este seguro es de gran utilidad por si acaso sufrimos algún accidente y tenemos que alargar los días. De esta manera, los gastos estarán cubiertos. Por otra parte, si vamos a un país exótico, nos focalizaremos también en las vacunas. Por otro lado, si optamos por el seguro de viaje y necesitamos regresar antes de lo debido por alguna circunstancia, se reembolsarán los pagos.
También es aconsejable contar con cobertura de responsabilidad civil en caso de que produzcamos algún daño a terceros a lo largo de nuestro viaje de luna de miel. Además, podemos complementar estas coberturas con otras relativas a la pérdida de documentación, tarjetas de crédito, llaves o bien, apertura de cajas fuertes.
Durante la luna de miel nos centraremos en descansar y no saturar la agenda con muchas actividades
Una vez hecho este paso y concretado el destino, es el momento de pensar en la maleta. Aquí debemos tener en cuenta el clima que predomina en el lugar que visitemos, para adaptar nuestra ropa a ello. Las cenas románticas son esenciales, por lo que nos vestiremos acorde a ellas. No puede faltar un vestido elegante, con algunos elementos de joyería que potencien nuestro look o una americana en el caso de los hombres.
Además, son días para disfrutar en pareja y estar compartiendo momentos únicos. En cuanto al calzado, si vamos a realizar expediciones, utilizaremos calzado deportivo cómodo o preparado para trekking y para los momentos de relax, podemos incluir otros zapatos para los momentos de relax con nuestra pareja.
Al hilo de lo que comentamos de las excursiones, es importante no saturar nuestros días con muchas actividades. Recordemos que es un momento para estar con nuestra pareja, descansando. En caso de que hayamos escogido un destino de costa, reservaremos varios días para acudir a la playa a descansar.
Tratemos de no llenar nuestra maleta y dejemos hueco por si durante nuestro viaje de luna de miel nos compramos algo en el lugar de destino. Siempre puedes adoptar el estilo Marie Kondo para cerrar tu maleta.
Ahora que conocemos cuáles son los elementos más destacados de la luna de miel, es el momento de aplicarlos. De esta manera, conseguiremos que nuestra luna de miel sea única y podremos disfrutar de cada uno de esos días con absoluta felicidad.
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