Que maquillarse bien no es fácil es un concepto que tenemos claro todas las que no somos profesionales y que, al intentar serlo, cometemos multitud de errores también es verdad. Y es que, sin duda, hay ciertos momentos clave en los que se debe contar con los servicios de una maquilladora profesional, como si se da el caso de que tú eres la novia.
Pero, en otros, más en el día a día o en bodas a las que preferimos asistir habiéndonos maquillado nosotras (por los motivos que sean), hay que tener en cuenta ciertos consejos a la hora de prepararse. Para que no sigas cometiendo errores le hemos preguntado a varios expertos del sector cuáles son esos errores que todas las chicas cometemos a la hora de maquillarnos y cómo solucionarlos. ¡Allá van!
1. No tener en cuenta la luz
El maquillaje cambia de tonalidad según la época de la boda y también se debe tener muy en cuenta si el gran día se va a celebrar al aire libre o en un espacio interior. Sofía, fundadora de Sofi Puiggari Make Up, tiene muy claro este punto y por ello ofrece un servicio integral de maquillaje, peluquería y cuidado facial totalmente personalizado. Su formación, llevada a cabo en Argentina y España y sus años de experiencia son las dos características más destacables que harán que te sientas cómoda y puedas dejarte en sus manos el día de tu boda con total tranquilidad. Por supuesto, su servicio abarca desde tratamientos faciales y capilares, para preparar la piel y el cabello, pruebas previas, peluquería para el día de boda, total asesoramiento de imagen y desplazamiento al lugar en el que se vaya a celebrar el enlace.
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2. No adaptar el maquillaje al tipo de evento y la hora
Si se va a una boda de mañana el maquillaje suave y natural siempre será un acierto. A la luz del medio día las sombras se endurecen y unos ojos saturados de color pueden verse sobrecargados. Eso sí, no está de más resaltar las mejillas con un toque extra de rubor o polvos de sol, ya que otra de las características de esta luz es hacer que la cara parezca más pálida y plana. Conforme avanzan las horas del día se puede ir arriesgando más y, con las bodas de tarde o noche, comienza el terreno propicio para los looks más atrevidos.
Si te casas y estás buscando servicio de maquillaje en Madrid para tu boda, en Desmark-arte encontrarás lo mejor para ti. Los profesionales de su equipo cuentan con una excelente formación y experiencia en maquillaje profesional para eventos. Enamorados de la estética aportarán su profesionalidad a tus peticiones para resaltar tu belleza. Para que estés radiante te ofrecen un servicio de maquillaje integral que será una verdadera experiencia. Su máxima es que te sientas tú misma, nunca disfrazada, y en el primer encuentro te pedirán que vayas maquillada para poder ver así tu estilo personal. Para el día de tu boda cuentan con una peluquera profesional asociada por lo que el servicio es completo si así lo deseas. Por supuesto, para caballeros también ofrecen servicio de maquillaje.
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3. No preparar la piel
Rocío Roma Maquilladora & Estilista considera que, aunque cada vez menos, todavía se siguen cometiendo algunos errores a la hora de maquillarse, como es éste. Por eso aconseja que para que el maquillaje luzca bien es necesario que la piel reciba unos cuidados, por mínimos que sean, y que esté bien hidratada.
4. Aportar poca intensidad de sombra a los ojos
Los profesionales de PamperMe no se refieren a añadir colores oscuros para tus ojos, sino a que las sombras que se utilizan no suelen ser muy pigmentadas y casi no aportan color. ¡Consulta a un especialista y te aconsejará sobre las mejores!
5. Más no es sinónimo de mejor
La tendencia están en usar bases de maquillaje ligeras, muy luminosas y que dejen la piel perfecta, pero que también cubran sólo dónde tienen que cubrir. Es decir, conseguir una piel bonita sin efecto máscara.
En base a esto explican desde Sophie Make Up que en el caso de las novias, sobre todo, lo ideal es un maquillaje resistente a todo: besos, sudor, lágrimas de emoción, largas horas de ceremonia, comidas y baile. Si tu evento va a ser intenso el maquillaje tiene que poder seguir tu ritmo. Los fondos de maquillaje con fórmulas larga duración, las prebases para sombras o el maquillaje aplicado con aerógrafo, que dura hasta 18 horas, son los principales aliados. Si eres de las lloronas no olvides eyerliner y máscara waterproof, sino sufrirás algún pequeño gran desastre.
Cuando vamos a un evento más especial como es una boda intentamos maquillarnos de una forma que no solemos hacer a diario y por eso corremos el riesgo de elegir colores para las sombras de ojos que no nos favorecen con respecto a nuestra fisionomía o con nuestro estilismo”, resalta la maquilladora Marta Frutos. Para solucionar esta situación ella dice que menos siempre es más. No hay que disfrazarse, usar sombras muy potentes o exagerar el maquillaje… “Lo bonito es que nuestra piel luzca y esté radiante, aplicando cada producto en su área correspondiente del rostro”, comenta.
6. Efecto panda
Evita sellar tu maquillaje con polvos sueltos blanquecinos o poner iluminadores bajo los ojos si no te quieres ver como un adorable panda. Lo que vienen siendo las manchas en tonos blancos que aparecen al rebote de la luz del flash. Recomienda la maquilladora Rocío Roma que para evitar que esto suceda arruinando las fotos, se debe utilizar un corrector en el tono adecuado y ser sutiles aplicando polvo para sellarlo.
7. Tono de base más oscuro que tu piel
En la cultura occidental está de moda que el tono de piel sea más bien bronceado, a pesar de que en épocas pasadas sucedía totalmente lo contrario. A la hora de comprar una base, debes probarla en tu cara, a ser posible sin maquillar, en concreto a la altura de la mandíbula y/o mejilla. Con la idea de saber si ese es tu tono de piel, éste debe fundirse sin que quede señal alguna de que se ha aplicado. Aconseja además Mireia, de Al Son de un Pincel, que si quieres ir algo más morena puedes potenciar el tono con un toque de polvo bronceador dando forma a tus facciones.
8. Iluminador no es corrector blanco y viceversa
El iluminador, en formato de pincel dosificador, se usa a modo de corrector. Tanto él como el corrector blanco sirven para dar luz a ciertas zonas de la cara. Sin embargo cada uno se aplica en una zona diferente y sirve para algo distinto. Así, detalla Mireia de Al Son de un Pincel que el corrector ayuda a neutralizar las distintas tonalidades de las ojeras y que su tono variará según la necesidad de la piel para tapar esa tonalidad, y a la vez, iluminar la mirada. “En el caso del iluminador, éste también aporta luz, pero a otras zonas como los pómulos, la línea superior de los labios o el área de la nariz. Con él no hay necesidad de neutralizar ningún tono de la piel, como con el anterior”, apunta.
9 . No siempre hay que definir las cejas
No es imprescindible hacerlo, pero sí que dando algo más de definición, se ayuda a intensificar la mirada.Debe hacerse cuando falte pelo, usando siempre un lápiz o sombra un tono o dos más claro que el color natural de las propias. Nunca de color negro. “Hay que dibujar pequeños pelitos en la misma dirección en la que estén los pelos en esa zona. En el nacimiento los trazos serán más suaves y algo más marcados en su extremo”, señala la profesional de Al Son de un Pincel.
“Unas cejas casi inexistentes restan expresión al maquillaje, mientras que unas cejas bien maquilladas esculpen el rostro, le dan fuerza a la mirada y conformarán un marco perfecto que hará que tu maquillaje de ojos destaque”, detalla Rocío Roma.
10. No, no y no a la combinación de sombras con el color de tu vestido
Se trata de un error más que común que, por suerte, va desapareciendo. No se consigue potenciar la mirada, no irás mejor, no es tendencia, no irás elegante… ¿Necesitas alguna razón más? Lo que sí puedes hacer es mezclar algún tono o tonos parecidos a los del estilismo con otros más suaves y que te favorezcan como tonos tierra.
11. No a delinear tus ojos con lápiz negro por dentro
Lo único que consigues con ello es hacer que tus ojos parezcan más pequeños. Lo mejor para dar intensidad a la mirada es delinearlos por encima del párpado móvil. “Mi consejo es hacerlo a partir de la mitad de nuestro ojo, hacia fuera”, señala Mireia de Al Son de un Pincel.
12. No pensar en si se harán o no fotos profesionales
Desde PamperMe dicen que si te va a fotografiar un profesional tienes que tener en cuenta que el flash y la potencia de cámara, ya que hacen que todas las imperfecciones se noten más. Por ello, el maquillaje debe ser un poco más “cubriente” en esas zonas que se quieran disimular, como en las ojeras o en las marcas de acné.
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